martes, 15 de noviembre de 2016

SUSURRO...






  
¡Sentir! Cuál es la razón de esa palabra
¿Es que tiene diferente significados, con el pasar del tiempo?
Percibir, es otro verbo que acude a mi mente,
El cual  puedo palpar.


También tengo el verbo Reconocer, 
Pareciera un juego macabro de conjugaciones.


Pensaba que era conocedora de todos ellos.
Cuántos te quiero, que hoy suenan vacíos.


Por el solo hecho de sentir o percibe o reconoce, ese algo, que está dentro pero muy dentro de mí percatándose y reapareciendo con un brillo nuevo. Alumbrando los sentidos del placer.


No quiero ponerle nombre. Diremos que se llama "Susurro" y que Sólo él sabe de dónde ha salido y qué pretende.

Pudiera decirles que es una suave brisa que no empuja
Sólo me lleva sin prisa y con paciencia hacia algún lado.
Que tampoco explica.


Jamás había sentido lo que no sé qué siento.
Jamás había estado mi alma y espíritu tan repleto de paz
Y seguridad.


Es contradictorio pero no puedo explicarlo
Cómo su contacto casual, me hace sentir sin apresuramiento.
Sólo sentir.


Su suave fragancia se esparce, entre las hojas
Llegando a mi cuerpo como ese abrazo que subyuga.
No puedo dejar de percibirlo. En cada bocanada de oxígeno que entra con su esencia de hombre acariciando mi yo interno.
Es un agasajo tan íntimo, que se hace imposible
No sonreír, cuando penetra por mis poros.


En estos momentos, sólo son sus ojos pícaros, su sonrisa directa
y franca, los mensajes que emite, en cada movimiento a través de su cuerpo.


Son sus manos, que sólo con rozar mi piel es suficiente para que mi cuerpo se estremezca sutilmente.


No quiero ponerle nombre, sólo sé que es como si estuviera caminando sobre papel de arroz y que no debo pisar fuerte
para no rasgarlo.


Eso hace que me sienta extasiada en mis recuerdos.
Sólo le permito breves momentos en ellos pero sin pensarlo,
se ha ido formando una especia de neblina,
que cobra forma, vida y fuerza pero no quiero
Agredir esa sensación. Es difícil llegar a sentir
Éxtasis por alguien al que solo percibes.
Donde solo sientes una energía fuerte y positiva.
Qué te embriaga y te hace ser tu misma.


¿No es algo paradójico?


¡A mí me parece de locos!


Sé que no soy la única que ha sentido de esta forma.
No estamos hablando de carne, como tal.
Hablo del sentimiento, en toda su expresión.
De tu Yo más íntimo. 
De ese cuarto corazón que tenemos.


A veces creo que estoy en los años sesenta, experimentando
aquella legítima idea de "Hacer el amor y no la guerra"


¿Locura? Y quién dijo que sentir no es algo alocado.


Pero no le pondré nombre, lo llamaré "Susurro"



Carmen Pacheco
lasculpasylamuertedelamorii@hotmail.com
@Erotismo10
16 de noviembre de 2016



3 comentarios: